Dios es el viento que llena mis velas y me da la fuerza para nunca rendirme.
Mi familia es mi tripulación y mi esposo es mi capitán. Juntos luchamos contra viento y marea en los días tormentosos, y disfrutamos de los de soleada calma.
En cada viaje jamás pueden faltar un libro y un cuaderno. Porque leer y escribir son comida y medicina abordo de esta nave.
Mis metas son mi puerto, mi corazón mi compás y la experiencia mi ancla.
Esta soy yo, un velero navegando océanos de sueños.
3 comentarios:
Excelente manera de publicar "palabaras fotográficas" que solo las habla la naturaleza.
Saludos:
En Bus Por Bogotá.
Gracias por tus lindas palabras. Estoy de acuerdo contigo, solo la naturaleza sabe hablar tan clara y abiertamente.
Catalina Prieto
Solo para aquellos ojos que ven mas alla de lo que nos muestra la belleza de una naturaleza que en cada gota derramada, vierte su poder y fuerza.
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